En las entrañas de las tierras del estado de Guerrero, México, a unos 200 kilómetros al suroeste de Ciudad de México, se encuentra el complejo minero Los Filos, operado por la empresa canadiense Equinox Gold. Este proyecto, que incluye tres procesos de explotación a tajo abierto y dos minas subterráneas, según los informes financieros de la empresa, ha extraído entre 2021 y 2024 más de 607 mil 259 onzas de oro, en promedio vendido a 1mil 765 dólares por onza.
Equinox Gold anunció a sus accionistas desde enero pasado que el proyecto Los Filos rompió record al haber extraído 170 mil 369 onzas de oro en 2024, en comparación con 2023, cuando logró arrancarle a la tierra 159 mil 071 onzas de oro. De la misma forma comunicó que su objetivo era aumentar la producción de oro a 300 mil onzas anuales a partir de 2025, lo que implica la construcción de una planta de carbón en lixiviación y más infraestructura.
Para ello tiene que lograr el acuerdo con al menos tres comunidades indígenas de la región. Desde 2008 ha habido conflicto entre la empresa y las comunidades locales, especialmente con el ejido de Carrizalillo.
“Hemos llegado a un consenso sobre nuevos acuerdos con las tres comunidades locales. Dos han ratificado y firmado nuevos acuerdos a largo plazo; sin embargo, una comunidad sigue pendiente. La continuación de las operaciones en Los Filos en 2025 está sujeta a la conclusión satisfactoria de nuevos acuerdos a largo plazo con las tres comunidades a muy corto plazo”, sostiene la empresa en su informe de 2024, enfocándose específicamente a la reactivación de el desarrollo subterráneo Bermejal, el cual fue suspendido en 2023 hasta mejorar la infraestructura.
Las comunidades que han llegado a establecer acuerdos para la expansión del proceso de explotación de oro por parte de la empresa canadiense son la Mezcala y Xixhilapa, mientras que la comunidad de Carrizalillo, donde está establecido la mayor parte del proyecto minero, se opone a firmar nuevos convenios.
Carrizalillo pone en jaque a Equinox
La resistencia de la comunidad de Carrizalillo ha puesto en jaque la expansión del proyecto minero Los Filos. Desde el pasado 5 de febrero, los representantes agrarios del ejido de Carrizalillo lanzaron una misiva al presidente CEO de Equinox Gold, Greg Smith, anunciándole tajantemente que, “a finales de marzo de este año (2025) vence el convenio de ocupación temporal de tierras y el convenio social que la empresa tiene establecido con nuestro ejido por la renta de prácticamente el 100% de nuestras tierras que se integran por parcelas y tierras colectivas de uso común”.
La empresa debió haber reiniciado negociaciones desde un año atrás, tal y como estaba establecido en los convenios, afirman las autoridades agrarias, destacando que se han suscitado “una serie de incumplimientos”, como un proyecto de agua potable que debió haber cumplido la empresa desde seis años atrás.
Por el contrario, puntualizan los campesinos, “desde que inicio la minería en nuestras tierras nos empezaron a dar agua con arsénico”, a ello agregan que la empresa comenzó un ataque contra ellos con una “estrategia de desprestigio en contra de nuestro ejido, al hacer constante referencia que nosotros no queríamos sentarnos a negociar y que ello implicaría el inicio de cierre del proyecto”, señalan en la carta enviada al presidente CEO de Equinox Gold.
Las autoridades agrarias de Carrizalillo señalan que la empresa condicionó la negociación, determinando que se daría junto a las comunidades de Mezcala y Xochipala, pero el proyecto abarca el 100% del territorio de Carrizalillo. Según la Red Mexicana contra la Minería (REMA), la empresa ha intentado imponer un nuevo convenio que reduce drásticamente los beneficios para la comunidad.
Los Filos lleva en funcionamiento desde 2008. Estaba en manos de la empresa Leagold Mining, posteriormente Equinox Gold asumió la propiedad, en marzo de 2020, justo cuando se firmaron los convenios con los ejidatarios de Carrizalillo, ya que abarca el 100% de sus tierras. “Se encuentra literalmente a un costado de la zona urbana de nuestra población, no siendo así para las comunidades de Mezcala y Xochipala”, detallan los comunitarios.
La resistencia y amenazas de muerte
El ejido de Carrizalillo, ubicado en el municipio de Eduardo Neri, ha sido el epicentro de la resistencia contra Equinox Gold.
En febrero de 2025, las autoridades agrarias denunciaron amenazas de muerte y criminalización por parte de la empresa, acusando a Equinox Gold de utilizar tácticas intimidatorias, incluyendo la presencia de funcionarios estatales y representantes de otras comunidades para presionar la firma del convenio. “No es casual que su arenga está contribuyendo a la creación de amenazas de muerte de las que hacemos responsable al Sr. Hugo Vergara, personaje a quien le parece intolerante que una comunidad pueda ser capaz de solicitarle respeto a una empresa de Canadá”, remarcan los ejidatarios en su boletín de prensa emitido este 3 de marzo.

Las autoridades agrarias también denuncian que el pasado 1 de marzo, el gerente general de Equinox Gold, André Souza de Amorín, y el vicepresidente senior en México, Armando Fausto Ortega, llegaron a Carrizalillo sin previo aviso y realizaron un mitin público en las calles del pueblo.
Con una bocina en mano, intentaron convencer a los habitantes a firmar el convenio, argumentando que la comunidad perdería el "progreso y desarrollo" que la minería supuestamente trae. No obstante, solamente 15 personas, de más de 3 mil que forman la comunidad, asistieron al evento. La mayoría expresó su rechazo a las condiciones impuestas por la empresa.
Los representantes de la comunidad advierten que, si la mina cierra sus operaciones, tendrá que cumplir con los convenios legales de remediación ambiental y la indemnización por los daños causados.
Mientras tanto, la cuenta regresiva para la empresa ha comenzado, ya que el 31 de marzo de este año 2025 marca el fin de la vigencia del convenio actual entre Equinox Gold y Carrizalillo. Si no se llega a un acuerdo, la empresa perderá el derecho a operar en las tierras del ejido.
"El primero de abril empezará una nueva historia para nosotros", dijo una de las autoridades agrarias.