El Tribunal Colegiado en Materias de Trabajo y Administrativa del Décimo Cuarto Circuito, bajo la ponencia de la magistrada Julia Ramírez Alvarado, desestimó las quejas presentadas por niños y niñas mayas de Homún, Yucatán, contra las violaciones a la suspensión de operaciones de la mega granja de cerdos, cometidas por la empresa Producción Alimentaria Porcícola (Papo), en complicidad con la Secretaría de Desarrollo Sustentable (SDS).
En 2018 se ordenó la suspensión de la mega granja de cerdos en territorio del pueblo Maya de Homún, en Yucatán, y la medida fue ratificada en abril de 2021 por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
La suspensión fue otorgada a seis niños de la región de Homún. Con apoyo de sus familias y la ONG Indignación interpusieron una demanda de amparo para detener las actividades de la granja. El argumento principal fue la transgresión de los derechos de los niños a tener una vida digna con un medioambiente sano, con agua y aire limpios.
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La primera queja fue interpuesta cuando la SDS permitió que Papo realizara trabajos de mantenimiento en la fábrica de cerdos, con lo cual incumplió con la medida cautelar de suspensión de actividades de la mega granja.
Otra queja fue presentada cuando la misma dependencia estatal, pese a la orden de no reactivar las operaciones en la granja, permitió la instalación de la planta de tratamiento de aguas. Esto lo confirmó la propia SDS al emitir un documento asegurando que esa infraestructura cumplía con los estándares de descargas contaminantes.
La tercera queja fue interpuesta cuando el juez le dio trámite a un recurso presentado por Papo para revocar la suspensión, el cual era totalmente improcedente.
Sin embargo, en la audiencia realizada el jueves (3), el Tribunal declaró infundadas las dos primeras quejas, y desechó la tercera. Ahora, toca al Juez Segundo de Distrito en el Estado de Yucatán, Rogelio Leal Mota, decidir si retira o no la suspensión, la cual fue confirmada y ratificada en su momento por quien era la Jueza Cuarto de Distrito, Miriam Cámara Patrón; por el Tribunal Colegiado e incluso la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Hasta ahora, no se han publicado los acuerdos de la sesión, sin embargo, la decisión nos alerta: el Juez Leal Mota podría quitar la suspensión y reactivar las operaciones de la mega granja, poniendo en riesgo el derecho a la salud, al medio ambiente sano, al agua y a la libre determinación de la infancia y del pueblo maya de Homún.
El Juez Leal Mota ya se ha pronunciado a favor de la empresa Papo. En el 2018, ese juzgador se negó a otorgar una suspensión contra la fábrica de cerdos, dándole prioridad al discurso del empleo y el mal llamado desarrollo, por encima de la salud humana y ambiental, y de la libre autodeterminación del pueblo maya.
En la semana pasada, especialistas en salud y materia ambiental pertenecientes a universidades y organizaciones internacionales, presentaron un amicus curiae, en el que señalaron que la mega granja de Homún amenaza con ocasionar daños graves e irreversibles. También describieron los graves impactos a la salud, al agua y al ambiente ocasionados por la industria porcícola en Estados Unidos, y manifestaron la expectativa de que Leal Mota resuelva a favor de la niñez y el medio ambiente sano de Homún.