La organización Kanan Ts´ono´ot (Guardianes de los cenotes) anunció que un juzgado de Yucatán otorgó una suspensión definitiva al pueblo maya, resolución que busca evitar la imposición de megaproyectos que amenazan a estos cuerpos de agua.
La decisión fue tomada el pasado 30 de mayo por el Juzgado Cuarto de Distrito del Décimo Cuarto Circuito, quien argumentó la importancia de preservar la riqueza natural y cultural de la reserva geohidrológica del anillo de los cenotes en territorios de la península de Yucatán.
Esta resolución se da en el contexto de la presentación de una demanda de amparo por las y los Guardianes de los Cenotes, colectivo que exige la protección de los cuerpos de agua en respeto a sus derechos a un medio ambiente sano, a su autodeterminación y a la protección de su legado cultural.
“Por más de siete años hemos insistido y pedido a las autoridades federales, estatales y municipales que establezcan medidas que frenen la creciente afectación ambiental y territorial de Homún”, declaró para medios locales, José May, miembro de Kanan Ts´ono´ot.
Te puede interesar - En Yucatán, comunidades rechazan posible reanudación de granja de cerdos
El principal objetivo de las y los pobladores mayas es evitar el avance e imposición de megaproyectos que devastan el medioambiente y contaminan las reservas de agua, tales como las mega granjas porcícolas, monocultivos asociados con transgénicos, la expansión turística e inmobiliaria, así como otros proyectos extractivos.
Las y los miembros de Kanan Ts´ono´ot aseguran que estas iniciativas han contaminado el acuífero de la península de Yucatán, especialmente los cenotes, causando daños irreversibles al medio ambiente y afectando los derechos fundamentales de los pueblos mayas y el equilibrio de los territorios en los que viven.
Acorde al proceso de la demanda de amparo, esta resolución no significa que la acción legal haya sido ganada por las y los Guardianes de los Cenotes, pero sí representa una medida que coloca un freno a la implementación de megaproyectos de toda índole en el territorio maya de Homún debido al riesgo irreparable que podrían conllevar para el medioambiente y los derechos culturales del pueblo.
Amparo
Fue en febrero del 2022, en medio de batallas legales contra la expansión de mega granjas porcícolas que devastan el medioambiente, cuando habitantes de la comunidad maya de Homún emprendieron la exigencia al gobierno federal para que éste reconociera a los cenotes de la península como sujetos de derecho.
Te puede interesar - Juez mantiene suspensión de granja de cerdos en comunidad Maya
Para ello, las y los habitantes mayas, junto al colectivo Kanan Ts´ono´ot interpusieron una demanda de amparo, argumentando las omisiones de los diferentes niveles de gobierno y para exigir que el Estado reconozca a los cenotes como sujetos de derechos.
La demanda de amparo fue admitida el pasado 6 de marzo por un juzgado en Yucatán. Posteriormente la jueza de dicho distrito concedió una suspensión temporal a favor del pueblo maya, exigiendo a las autoridades que respondieran a sus demandas. Posteriormente, tras conocer las alegaciones de las autoridades responsables, la jueza determinó que sí existían argumentos para mantener la suspensión debido el riesgo de afectación ambiental que corren los cenotes.
Con ello, la suspensión definitiva se resolvió bajo el argumento de que la demora de las autoridades en responder a las peticiones del pueblo maya coloca en peligro el derecho de acceso a una justicia pronta y expedita, así como el principio de precaución del derecho ambiental.
Te puede interesar - Amenazan a infancia que defiende los cenotes en Homún
Las y los Guardianes de los Cenotes, junto a pobladores de Homún, señalaron que esta decisión, y la posibilidad de que el amparo se resuelva a favor de la comunidad maya, sentarían un cambio de paradigma.
“El cambio de paradigma conllevaría transitar de una visión meramente antropocéntrica, en donde la naturaleza está al servicio del ser humano, a una de carácter ecocéntrico, en donde el concepto de dignidad reconocido a las personas, se debe de ampliar a los diversos elementos naturales que, como en el caso de los cenotes, forman ecosistemas únicos que son fundamentales para la garantizar un adecuado equilibrio ecológico”, señalan mediante comunicado.
Por último, celebraron que el juicio puede sentar un precedente que “refuerce el ejercicio de la libre determinación de los pueblos originarios al darles la posibilidad de cuidado y administración de los cenotes por su importancia no sólo ambiental sino también cultural”.