En portada: Romeo Pérez Pérez y Miguel Pérez Santiz, hermano y padre del padre Marcelo encabezaron la peregrinación para exigir justicia por el asesinato del párroco. Foto: Jeny Pascacio
Miles de integrantes del Pueblo Creyente -movimiento católico que busca la paz y defensa del territorio- caminaron en una magna peregrinación para exigir justicia por el asesinato del padre tsotsil Marcelo Pérez Pérez y la desarticulación, desarme y desmantelamiento de los cárteles del crimen organizado del territorio chiapaneco.
La movilización fue convocada en el contexto del año jubilar y de los 100 años del natalicio del obispo Samuel Ruiz García, quien durante cuatro décadas sirvió y defendió los derechos de los pueblos originarios de Chiapas.
En su memoria, el Pueblo Creyente alzó la voz y exigió justicia para el también defensor de los derechos humanos Marcelo Pérez Pérez, asesinado el pasado 20 de octubre cuando salía de oficiar misa en la parroquia de Cuxtitali; lugar de donde partió uno de los tres contingentes que integró la peregrinación.
En el lugar del crimen los feligreses colocaron una ofrenda de flores y velas. Después iniciaron con la caminata con rezos y consignas. Antes de llegar al destino final, se unieron a otro extenso grupo de peregrinos, presididos por la familia de Marcelo Pérez, la parroquia de San Andrés, la Diócesis de San Cristóbal y Las Abejas de Acteal.
La multitud de mujeres, hombres e infancias procedentes de todo Chiapas, clamaron justicia con imágenes del sacerdote tsotsil en manos, además de banderitas blancas con las palabras justicia y paz, entre otros enérgicos mensajes escritos contra el crimen organizado y sus vínculos con el Estado.
“Alto al desplazamiento forzado”, “alto a los proyectos de muerte”, “alto a la narcopolítica”, “fuera cárteles de Chiapas”, “Marcelo, amigo, el pueblo está contigo”, “Viva la paz con justicia y dignidad”, por mencionar algunos.
Así caminaron hasta llegar al corazón de la ciudad, donde esperaron por casi una hora a que terminaran de llegar todos los grupos de peregrinos que abarrotaron la Plaza de la Paz, donde posteriormente se celebró la eucaristía.
Los líderes religiosos agradecieron a los miles de asistentes por viajar horas desde los diferentes municipios, para unirse a la magna peregrinación este domingo 3 de noviembre. La enorme respuesta de este llamado de paz, coincidieron, los llena de esperanza.
Más sacerdotes en riesgo
Después de las actividades, los líderes religiosos y dos representantes del Pueblo Creyente dieron una rueda de prensa en la curia diocesana de la Catedral de San Cristóbal, donde en voz de Monseñor Rodrigo Aguilar, llamaron a esclarecer el asesinato del padre Marcelo.
“A nosotros no ha llegado ninguna comunicación oficial”, dijo Monseñor en referencia a las investigaciones que realizan las autoridades sobre el asesinato del padre Marcelo, “lo que saben ustedes es lo que la Fiscalía ha dado a los medios noticiosos, esperamos información oficial para nosotros”.
Para José Filiberto Velázquez Florencio, representante del Centro de Derechos de las Víctimas Minerva Bello, que acompaña el caso, es necesario dar certeza a los hechos que privaron la vida al padre Marcelo.
“Estamos en la etapa de investigación complementaria, hay una persona vinculada a proceso y dos personas con órdenes de aprehensión sin ejecutar”. Explicó que son tres meses de investigación complementaria, pero la Fiscalía General de la República (FGR) necesitará un plazo de seis meses y solicitará ampliarlo ante un juez federal.
De esta manera, la orden de aprehensión que ejecutó la Fiscalía de Chiapas puede tener todos los medios necesarios de pruebas para que se pueda ratificar la orden de aprehensión a nivel federal, precisó el también sacerdote.
Son varias líneas de investigación, se han obtenido más entrevistas de personas cercanas al sacerdote, pero aún no se puede tener claro un móvil y serán respetuosos del proceso, agregó el defensor.
Por esta labor, el equipo de trabajo del Centro Minerva Bello y el de la FGR han sido objeto de hostigamiento constante. En la recolección de pruebas se han percatado de la presencia de personas a bordo de motocicletas y, en otro momento, uno de los abogados fue intimidado por dos sujetos cuando viajaba en su automóvil.
“Llamamos a las autoridades a que ejerzan su trabajo para permitirnos realizar el nuestro y el derecho de defender los derechos humanos”, dijo Velázquez.
El Mecanismo de Protección de Defensores y Periodistas acudirá a San Cristóbal de Las Casas para estudiar este caso y la seguridad de la familia y las personas que trabajaban con el padre Marcelo.
¡Fuera cárteles de Chiapas!
Los pronunciamientos de los grupos participantes en la peregrinación detallaron que las injusticias y violencias en todo el territorio chiapaneco continúan, sobre todo en la zona de la Frontera, Sierra, Soconusco, Costa, Cuxtepeques, Frailesca, Valles, Selva y Altos.
Te puede interesar - Más de 300 recomendaciones a México por crisis en derechos humanos
Situación que causa muertes y desapariciones de niñas, niños, adolescentes y jóvenes, además de extorsiones, desplazamientos forzados, entre otros delitos que “con profundo dolor afrontamos (...) seguimos aprendiendo como pueblo a caminar entre la violencia y no vamos a renunciar a hacerlo”, fue la palabra de la Diócesis de San Cristóbal.
Exigió alto a la violencia, así como el inmediato desarme, desarticulación y desmantelamiento de los grupos criminales, demanda que se ha repetido por años en las denuncias del Pueblo Creyente.
Incluso han alertado sobre el reclutamiento forzado de menores de edad y jóvenes; las comunidades secuestradas y usadas como barrera humana por grupos criminales; además de las intimidaciones y amenazas contra defensores, sacerdotes y misioneros.
Aunque no precisó el número, Monseñor Rodrigo Aguilar dijo que son varios los sacerdotes en riesgo por la violencia en las regiones, por lo que se están valorando los riesgos y tomando medidas al respecto.
El padre Miguel Ángel Montoya Moreno, agregó que a partir del asesinato del padre Marcelo ha sido bastante complicado ejercer la labor ministerial en la Diócesis de San Cristóbal y también se han percatado de la inusual presencia de personas a bordo de motocicletas.
“Nos llama la atención que el nivel de inseguridad en el estado ha incrementado muchísimo para todos. Todos los que vivimos en Chiapas estamos en riesgo y eso preocupa grandemente”, compartió el párroco.
Montoya se unió al llamado para que las autoridades del estado y federales puedan ofrecer garantías de seguridad, “pero no solo para nosotros, la iglesia, lo pedimos para todos los habitantes”.
“Ellos tienen otros datos como lo han anunciado o evidenciado, de tal manera que esta violencia no se ve, sólo la vemos nosotros, sólo la estamos sufriendo nosotros”, sostuvo Montoya quien enfatizó que es fundamental que las autoridades brinden garantías de seguridad y que no cierren los ojos a la realidad de violencia en Chiapas y otros territorios de México.