En Costa Rica, la noche del 18 de marzo 2019 fue asesinado Sergio Rojas Ortíz, líder indígena Bribri miembro del Consejo de Autoridades Propias Defensores de la Madre Tierra del Pueblo de Salitre, la Coordinación Nacional del Frente Nacional de Pueblos Indígenas (FRENAPI) y del consejo Ditsö Iria Ajkökonuwakpä (Defensores de la Tierra).
Rojas Ortíz recibió disparos de arma de fuego en su casa en Yeri, territorio de Salitre, región sur del país centroamericano.
Desde el año 2012, los pueblos indígenas Bribri y Térraba decidieron ejercer la autonomía desde sus territorios para recuperar las tierras usurpadas por terratenientes costarricenses en la región del pacífico sur.
Tras años de sentencias y jurisprudencia que otorgaban derechos a los pueblos indígenas pero ante la inacción del Estado, Rojas Ortiz fue uno de los precursores de las recuperaciones
“Decidimos ejercer la autonomía con ley o sin ley dentro de nuestro territorio”, declaró Sergio cuando se discutía en la asamblea el proyecto de Ley de Desarrollo Autónomo hace tres años, legislatura que omitió los reclamos indígenas.
El mismo día de su asesinato, Rojas Ortíz se presentó a la Fiscalía del cantón de Buenos Aires para denunciar la usurpación de tierras de no indígenas y las amenazas y agresiones que vienen sufriendo y enfrentando en total impunidad y con la negligente actuación de autoridades, tanto locales como nacionales.
Mariana Delgado, compañera bribri recuperante del Territorio de Salitre, reporta que, casi 24 horas después del asesinato de Sergio, los asesinos siguen libres e impunes circulando por el Territorio de Salitre. “Hay amenazas contra quienes permanecen en las fincas recuperadas. Es un ambiente muy tenso, muy desprotegido porque no sabemos si hoy entran los agresores, porque como mataron a Sergio en su propia casa no sabemos que puede pasar con las familias recuperantes”.
Jorge Morales, también de la comunidad de Salitre asevera que el ataque es “no solamente para el territorio. El (Sergio), junto a otros líderes, han puesto en marcha la aplicación de la ley por parte de los mismos territorios y eso marca un antes y un después para el movimiento indígena en Costa Rica, en tanto se dejó de esperar a que el Estado que constantemente nos rechaza e invisibiliza.
Para Morales, los motivos para el asesinato de Sergio son los grandes intereses comerciales detrás de sus tierras: ganado y la siembra de monocultivos de piña, “amparados por el Estado y los gobiernos, los que han pasado y los de turno, que les dieron impunidad total (a los finqueros) en otras acciones que amedrentan a la comunidad”.
“Ante la violencia, las comunidades han decidido tomar acciones y aplicar la ley por nuestra cuenta. Por ese motivo es que asesinan a Sergio Rojas. Él no estaba haciendo nada fuera de la ley, lo que estaba haciendo era hacer valer nuestros derecho. Con el asesinato tratan de silenciar a Sergio y enviar un mensaje de miedo hacia nosotros. Sentimos rabia e indignación, pero miedo no es algo que nos genere. Vamos a reforzar nuestra lucha e identidad que nos permita continuar con nuestras acciones”.
Salitre, junto a la comunidad de Térraba, son dos territorios que poseen medidas cautelares por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) debido a los niveles de violencia y agresiones de los cuales han sido objeto durante su proceso de recuperación de tierras.
En su resolución 16/15, publicada en abril de 2015 la CIDH señala que: “es necesario que la Policía mantenga presencia en el Territorio Indígena Salitre, mientras el Gobierno asume la recuperación de tierras indígenas por las vías legales, mediante la instalación de los puestos de control solicitados y con patrullajes por parte de personal policial ajeno al cantón de Buenos Aires.
Pese a las disposiciones emitidas por la CIDH los habitantes del territorio bribri de Salitre han denunciado el incumplimiento por parte del Estado de Costa rica.
Según declaraciones dadas a la prensa local por el hermano de Sergio Rojas hace año y medio dejó de contar con protección policial. “La autoridad no hacía nunca caso para que vinieran a ver cuando este tipo de cosas pasaban (disparos o robos en territorios indígenas)”.
“Todos esos derechos nuestros, el gobierno no los ha reconocido. Y si los reconoce en el papel, en la práctica no los reconoce”, denunciaba Sergio Rojas en entrevista para Radio Machete hace dos semanas.
“La mayoría de la policía aquí en Buenos Aires son familiares de los terratenientes invasores y ellos llegan a encubrir a los invasores y oprimir a los indígenas”, también declaraba Rojas quien en noviembre de 2014 fue encarcelado luego de que el Poder Judicial ingresará al territorio bribri de Salitre para allanar las casas de los miembros del Gobierno Local y declararlos como delincuentes peligrosos.
Actualmente sólo el 38% del territorio Bribri de Salitre es controlado por personas indígenas.
Al día siguiente del crimen, diversos grupos han realizado y convocado a movilizaciones y actos de protesta para exigir justicia por el asesinato de Sergio Rojas Ortiz.
