Una vez más, un grupo de más de 100 paramilitares armados entraron, atacaron a balazos y destruyeron las viviendas de la comunidad zapoteca de El Rebollero, San Pablo Cuatro Venados, en Oaxaca. Así lo denunciaron hoy sus habitantes en un comunicado en el que señalan que la incursión inició cerca de las 6 de la mañana de este sábado (28).
Un habitante de El Rebollero, cuya identidad se reserva por seguridad, explicó por teléfono para Avispa Midiaque las familias de la comunidad (en las que hay mujeres, niñas, niños y adultos mayores) se encuentran escondidas y “acorraladas” en los alrededores, ya que todos los accesos a la comunidad se encuentran bloqueados y el grupo de atacantes se mantiene en las inmediaciones de San Pablo Cuatro Venados, disparando esporádicamente.
“No permiten la entrada ni la salida de la comunidad, estamos esperando a que se retiren porque no hay víveres”, explica el residente, y menciona que las familias desplazadas están “resguardadas de alguna manera entre el bosque”.
El ataque sucede días antes de que la comunidad celebrara la inauguración de su nueva casa de salud y su capilla: “símbolo de la reconstrucción de nuestras viviendas” tal como lo concebían sus habitantes; ya que hace tres años, el 31 de mayo de 2019, más de 500 personas armadas también asaltaron las comunidades de El Rebollero y Rio Minas, arrasándolas por completo.
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Según el testimonio recabado por Avispa Midia,en el nuevo ataqueaproximadamente 30 viviendas, incluida la nueva capilla y el centro de salud, fueron destruidas. También fue robado ganado y pertenencias personales. Hasta el momento no hay heridos reportados.
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Una serie de ataques armados
Éste no es el primer ataque armado que sufre y denuncia la comunidad de El Rebollero. Apenas este año, a principios de abril, la comunidad fue asediada por un grupo de más de 30 personas que dispararon sus armas de fuego durante una semana aproximadamente.
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En julio de 2021, luego de que un helicóptero sobrevolara y descendiera en las inmediaciones de la comunidad, otro grupo de personas armadas también atacó a balazos a las y los comuneros del lugar.
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En febrero del mismo año, unas 20 personas volvieron a atacar a balazos a pobladores de San Pablo Cuatro Venados. Específicamente en los parajes “El Rebollero”, “Los Arquitos” y “Río Minas”.
En 2019, Avispa Midia documentó la destrucción que provocó un segundo intento de desalojo durante el ataque del 31 de mayo y presenció un segundo ataque a balazos el día siguiente. En aquella ocasión derribaron y quemaron 24 viviendas, quemaron el maíz, frijol y otros granos que se almacenaban para las siembras; rompieron el molino comunitarios y las celdas solares; robaron vacas, pertenencias personales, dos plantas generadoras de energía y una bomba de agua.
En cada ocasión, las y los pobladores de El Rebollero han denunciado públicamente los ataques. Apenas en abril del presente año, en conferencia de prensa, informaron que no pudieron recibir a la Caravana por el Agua y la Vida dado el incremento de la violencia paramilitar, y responsabilizaron, entre otros, a la empresa canadiense Continuum Resourses Ltd: “quién ha sido concesionada para realizar exploraciones en nuestro territorio, contaminando el Río Valiente quién sostiene la vida proveyendo de agua nuestra comunidad y otras comunidades”.
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Las y los pobladores de El Rebollero, Los Arquitos y Río Minas han agotado vías legales y denunciado su situación ante las instancias correspondientes en los tres niveles de gobierno, para hacer valer sus derechos y su libre autodeterminación como pueblo originario, en medio de un conflicto agrario entre los municipios de San Pablo Cuatro Venados y Cuilápam de Guerrero.
Sin embargo, aseguran que han sido ignorados. “Por ello, responsabilizamos al gobierno del estado, que preside Alejando Murat Hinojosa. Responsabilizamos al gobierno federal que preside Andrés Manuel López Obrador y a las autoridades de Cuilápam de Guerrero. También a Flavio Sosa Villavicencencio y a su hermano, del partido de Morena sobre estos acontecimientos y los daños provocados”.
