La construcción de la presa de Hidroituango en Colombia, enmarcada en la generación de "energía limpia", ha generado múltiples afectaciones para las comunidades que no han sido tomadas en cuenta por parte de EPM. El Movimiento Ríos Vivos, ha venido denunciando desalojos forzados, amenazas, persecuciones y asesinatos de sus integrantes.