Este 8 de marzo fue detenida la exmilitar de los Estados Unidos (EEUU) Chelsea Manning. Fue arrestada por 2ª ocasión por negarse a declarar en torno a la investigación sobre el caso de la organización WikiLeaks, fundada en el año 2006 por Julian Assange.
El juez del distrito estadounidense Claude Hilton, del estado de Virginia, ordenó la detención por desacato al tribunal al no querer testificar. Por su parte Manning argumentó que no tiene intención de declarar y que está preparada para una buena defensa legal. “Mantendré mis principios. Agotaré todos los recursos legales disponibles. Mi equipo legal impugnará el secreto de estos procedimientos y estoy preparada para enfrentar las consecuencias de mi negativa”, añadió.
La primera vez que fue arrestada la ex agente de inteligencia fue en Irak en el año 2010, fue acusada por divulgar más de 700.000 documentos confidenciales a Wikileaks, considerado la mayor filtración de información diplomática y militar clasificada en la historia de EE.UU. Cumplió siete años en prisión de una condena militar de 35 años y en el periodo de gobierno de Barck Obama fue liberada.
Los abogados de la ex agente pidieron ante el juez que su cliente pudiera cumplir un arresto domiciliario por problemas de salud, pero el juez negó esta petición. Manning deberá permanecer en prisión hasta que acceda a testificar o hasta que el gran jurado finalice su línea de investigación, donde involucran a la ex militar.
La detenida es clara en su determinación y advierte que “en solidaridad con muchos activistas que se enfrentan a la adversidad, me mantendré fiel a mis principios”, ha dicho Manning.
Assange ha estado viviendo en la embajada ecuatoriana en Londres para evitar el arresto por cargos de desacato en el Reino Unido. Una parte de la filtración, a la que Wikileaks se refiere como “Año cero”, consiste en 8.761 documentos y archivos de una red de alta seguridad aislada y situada en el centro que la CIA tiene situado en Langley, Virginia. Es llamado programa “Año Cero”, un sistema de armas informáticas para hackear teléfonos y dispositivos producidos por compañías estadounidenses como Apple, Google, Windows de Microsoft y cualquier sistema de telefonía y pantallas de plasma con conexión a Internet, que se convertían en micrófonos encubiertos a través de los cuales se puede espiar a sus usuarios.Wikileaks.
