En portada: Manifestantes chocan con fuerzas de seguridad en el centro de Los Ángeles, este domingo 8 de junio de 2025, tras la protesta de anoche contra las redadas de inmigración. Foto: Jae Hong
Donald Trump autorizó, este domingo (8), el despliegue de 2 mil efectivos de la Guardia Nacional hacia Los Ángeles para ayudar a contener las manifestaciones de miles de personas que han salido a las calles para detener las redadas masivas en esta ciudad. Este contexto se suscitó desde el sábado (7), cuando un operativo del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) comenzó a detener a migrantes en la ciudad de Paramount. A partir de ahí estallaron las protestas en distintos puntos de esta gran ciudad.
Desde el sábado y hasta este domingo se han agudizados las acciones de los manifestantes, quienes sostienen consignas contra el ICE y la Guardia Nacional mediante pancartas, autos de las fuerzas armadas incendiadas, autopistas bloqueadas, barricadas y movilizaciones. Las calles se han pintado con banderas de distintas nacionalidades, resaltando la bandera mexicana.
Una parte de los manifestantes han bloqueado las instalaciones del ICE, al lado de la autopista 101, de donde no pueden salir vehículos en los cuales piensan trasladar a los detenidos, entre quienes se encuentran trabajadores de diversas industrias.
En las redadas también ha participado el Buró Federal de Investigaciones (FBI) y la Administración de Control de Drogas, conocida por sus siglas como DEA. Junto a estas corporaciones se ha sumado el contingente de las unidades de la 79ª Brigada de Infantería, ya presentes en el área metropolitana de Los Ángeles. La decisión fue adoptada por el presidente Trump.
El Comando Norte de Estados Unidos (USNORTHCOM, por sus siglas en inglés), a quien pertenece esta Brigada, no dio mayores detalles, solo mencionó que “se proporcionará información adicional a medida que se identifiquen y desplieguen las unidades”, dijo la institución en una publicación difundida por redes sociales.
Este despliegue se produce justo después de que la actuación de los agentes del ICE implicó que estallaran las protestas masivas, a las que Trump se refirió en sus redes sociales como acciones de “inmigrantes indocumentados y criminales”. No obstante, en las calles se puede percibir la participación de gentes distintas nacionalidades.
El secretario de Defensa, Pete Hegseth, también ha dicho que los marines en servicio activo en Camp Pendleton están en “alerta máxima” y que los utilizará contra los manifestantes si continúan las protestas.
Mientras tanto, grupos y colectividades antifascistas de Los Ángeles, han anunciado que preparan más acciones de sabotaje durante la noche y esto ha alertado a las fuerzas represivas por lo que la secretaria de Seguridad Nacional de EEUU (DHS, por sus siglas en inglés), Kristi Noem, sostuvo, “no vamos a permitir que se repita lo de 2020”, en relación con las protestas que estallaron en Minneapolis durante el verano de ese año suscitadas por el asesinato de George Floyd y el movimiento Black Lives Matter.
Trump, en un intento de justificar la represión, ha anunciado que “multitudes violentas e insurreccionales están atacando” a agentes federales para frenar las deportaciones, por lo que ha invocado la Ley de Insurrección de 1807. Los manifestantes sostienen una intensa actividad en redes sociales desde donde hacen un llamado a la solidaridad en Los Ángeles, el resto de los Estados Unidos y fuera del país. El incremento de gentes protestando no promete que vayan a parar las protestas, al tiempo que los medios locales anuncian que es posible que la situación se desborde.
Mientras que Trump, como la mayoría de sus determinaciones desesperadas, llama a las fuerzas del orden a sofocar las masivas manifestaciones por lo que ha ordenado a su gabinete tomar "todas las medidas necesarias" ante lo que ha calificado como "invasión migratoria" en Los Ángeles.